Joshua Cairós, FFG©
El Gremio de Alquimistas es una antigua sociedad de sabios, a veces llamados Piromantes, que conocen algunas habilidades mágicas y misteriosas reunidas con los años.
Historia[]
En sus primeros años, el gremio era muy poderoso, pero desde el reinado de Robert I, las habilidades del gremio y su influencia disminuyeron enormemente. Los maestres los han suplantado en gran parte. En el apogeo de su poder, se afirmó que los alquimistas tenían la capacidad de transmutar los metales y crear criaturas vivientes a partir del fuego. En sus últimos años, todavía apuntanban a grandes potencias, pero la única habilidad que demuestran tener es la creación de fuego valyrio. Un miembro de pleno derecho del Gremio de Alquimistas es denominado como Sapiencia. También hay aprendices y acólitos para ayudarles en lo que preciso fuera.[1]
El fuego valyrio es un líquido volátil similar al napalm y el fuego griego que sólo los alquimistas son capaces de fabricar. Los alquimistas suelen referirse a él como "la sustancia". Se puede manifestar en llamas a partir de la chispa más pequeña, e incluso a veces por el calor de la luz solar. A medida que envejece, se vuelve aún más volátil. Una vez que un frasco se enciende, se quema con llamaradas verdes que son imposibles de extinguir. Esta sustancia se filtra en muchos materiales, haciéndolos inflamables también. Normalmente se encarga su uso como arma de guerra. El fuego valyrio arde bajo el agua y es capaz de derretir la carne hasta dejarla como si fuera sebo.
Los alquimistas crearon un gran depósito de fuego valyrio en sus instalaciones, que se encuentran debajo de la Colina de Rhaenys, en Desembarco del Rey. La sala es un laberinto imponente de piedra fría y negra. Los Acólitos del Gremio hacen fuegos en celdas de aislamiento. Los alquimistas sostienen que la creación de un incendio es un proceso delicado y mágico. En caso de estallar el incendio, los techos de las falsas celdas están diseñadas para colapsar y llenar la celda con arena, apagando el fuego y matando al acólito. El fuego valyrio está contenido en vasijas o frascos de barro, textura para aumentar el agarre. Estos recipientes deben ser manejados cuidadosamente para evitar su fractura o combustión. Los frascos más volátiles se encuentran en almacenes de agua y se transportan en vagones llenos de arena. En un momento dado, en el depósito de la organización podían contarse miles de frascos.
Los alquimistas disfrutaron de un período de mayor influencia durante el reinado del rey Aerys II Targaryen, que obtenía gran placer con los incendios y el fuego valyrio, utilizados por ejemplo para las ejecuciones, como la de Lord Rickard Stark. El Rey Loco convocó a tres sabios alquimistas, Lord Rossart, Garigus y Belis, para crear una gran cantidad de fuego para destruir la ciudad de Desembarco del Rey en caso de que perdieran en la Guerra del Usurpador. Cuando su mano Lord Qarlton Chelsted se opuso al plan y renunció a su cargo como signo de disgusto, Aerys ordenó hacerle arder hasta la muerte con sustancia y nombró a Lord Rossart Mano. [2]Durante el saqueo de Desembarco del Rey, un gran número de sapiencias fueron asesinados, por lo que sus acólitos ocultaron bajo la ciudad grandes cantidades de fuego valyrio, algunos de ellos sólo siendo redescubiertos durante la Guerra de los Cinco Reyes.
Eventos Recientes[]
Choque de Reyes[]
Durante la Guerra de los Cinco Reyes, Cersei Lannister encargó fabricar diez mil frascos de sustancia para añadirla a las defensas de la ciudad. Los alquimistas reportaron un incremento inexplicable en la eficacia de sus hechizos, donde se señaló rápidamente que no había sido tan fácil, ya que durante la existencia de los dragones, lo que les permitió crear el contenido más rápidamente.
Festín de Cuervos[]
Los alquimistas fueron nuevamente contratados por la Corona para quemar la Torre de la Mano.[3]
Referencias[]
- ↑ Choque de Reyes, Capítulo 20, Tyrion.
- ↑ Tormenta de Espadas, Capítulo 37, Jaime.
- ↑ Festín de Cuervos, Capítulo 12, Cersei.
