Un siervo es un sirviente que tiene casi la calidad de un esclavo en las Islas del Hierro. Los siervos solo se obtienen "pagando el precio del hierro", es decir, capturándolos o por saqueo de acuerdo a las Antiguas Costumbres. No son esclavos propiamente dichos, pues no pueden ser vendidos, pero son propiedad de un hombre o de una familia. Sus hijos son libres siempre y cuando atraviesen el rito de ahogamiento del Dios Ahogado.[1]
Referencias[]
- ↑ Festín de Cuervos, Capítulo 29, El Saqueador.